En lugar de disfrutar de los brillantes tutús y canesús que habían llamado su atención en un principio, se cubría todo lo que podía con prendas de cuello alto.
Ojos grandes, hermosos, expresivos, lucientes y con largas pestañas, bien claras y rientes; las orejas pequeñas, delgadas; para mientes si tiene el cuello alto, así gusta a las gentes.
En estas paginas destacamos chaquetas, sueters y chalecos con mostacillas de cuello alto, calados, sin hombros o cruzados con diseños clásicos y modernos.