Por tanto, el farmacólogo clínico desarrolla su actividad en el medio hospitalario, centros de atención primaria, universidad, administración, industria farmacéutica y otras instituciones.
Por ello especialmente todos los centros sanitarios (tanto hospitalarios como de atención primaria y los servicios extrahospitalarios) deben estar preparados para realizar una reanimación cardiopulmonar pediátrica.