Sus claves para romper con la complementariedad (que sustenta la dominación y el enquistamiento del sufrimiento que a tantas y tantos atormenta) me resultan iluminadoras.
Esta nueva criptografía se considera el milagro tecnológico, un sistema de cifrado imposible de romper, incluso si fuera posible construir un ordenador cuántico.
Hablamos de comunicación en el sentido amplio de la palabra, para romper con la visión instrumental y propiciar un clima armónico, dialogador, en una sociedad más justa e inclusiva.
En cualquier caso, la lógica de la nueva tecnología es la misma: romper los obstáculos y fluidificar los combustibles, para que puedan emerger por presión a la superficie.