Tenía coartación aórtica y me sometía a revisiones periódicas, pero no quise asumir mi enfermedad hasta que me dijeron que tenía que operarme, a los 18 años.
Un cheque por más de cinco mil bolívares tenía que ser sometido a revisiones, autorizaciones y otras tortuosidades que escapaban a la dinámica de ese gasto, casi siempre urgente.
Brodmann y revisiones posteriores parcelaron el córtex frontal en 15 áreas citoarquitectónicas, sin guardar una relación morfométrica exacta con las cisuras y circunvoluciones mencionadas.