Etimológicamente, la palabra sinceridad viene del latín sine cera, traducido literalmente como sincera por alusión a la miel desprovista de aquellos residuos que pueden impurificar la.
La zona disfótica, que se extiende por debajo de los 100 metros está caracterizada por una permanente oscuridad y desprovista por tanto de organismos autótrofos.
En las encuestas aparecen frecuentemente los amigos como grupo social relevante que proporciona sentido a la vida, ya desprovista de contenido productivo.