Durante esa década, las empresas norteamericanas del sector del automóvil comienzan a utilizar el telemarketing como un valioso instrumento en sus ventas.
Este sólido desastre de política externa se ha mantenido sin cambiar un adarme durante las últimas 11 administraciones norteamericanas; seis republicanas y cinco demócratas.
En aquellos mismos años 50, las autoridades norteamericanas intentaron imponer la costumbre de fluorar el agua potable esgrimiendo la protección dental infantil.
Sin embargo, el disyuntor quedó tan destruido en el accidente que las autoridades norteamericanas no pudieron determinar si realmente tenía un problema, y en su caso qué problema.