Sus hombres de confianza, sus instrumentos más inmediatos, no eran arcaicas ilustraciones de la urbe, sino gente nueva, provinciales, personajes enérgicos y eficientes.
Nos hará escuchar melodías arcaicas, buscando quizás el mismo efecto que los metrónomos, pero las mezcla con ritmos y géneros pertenecientes a nuestra época.