El cuerpo no se descompone, pero lo que absorbe el natrón son las mismas sustancias orgánicas que hubieran sido devoradas por las bacterias y los gusanos.
La arcilla estimula la eliminación de parásitos, tanto los unicelulares (amebas), como los gusanos, y sus toxinas, mineralizando el organismo debilitado.
Allí hubo encevichado de pavón en leche de tigra de copoazú, tequeños de gusanos de moriche, bon bon bum de araña mona, lomo de báquiro engranillado de bachaco limonero.