Una evaluación en 2004 demostró que los aranceles estaban desarmonizados para casi el 30 % de los productos agropecuarios entre los cinco países centroamericanos.
El libre comercio implica cero aranceles, cero subsidios, cero barreras no arancelarias, libre flujo de bienes y servicios; todo ello dentro de un marco competitivo.
Previamente, el mandatario había hecho algunas concesiones a los campesinos, eliminando los aranceles a los fertilizantes e imponiendo salvaguardias para reducir la importación de alimentos.