El Opus Dei (al igual que otras instituciones religiosas y no religiosas) recibe donaciones de personas particulares y se siente muy agradecido por ellas.
El Opus Dei considera su tarea (recordar la vocación universal a la santidad) como una misión que necesita un plan de realización sistemático y organizado.
Enseñó quince fotocopias para probar que los miembros del Opus Dei y de instituciones próximas a la organización estaban profundamente implicadas en el caso.