Pocos seres humanos podrían sobrevivir en la tundra o en las pluviselvas tropicales si no pertenecieran a un grupo con cultura, munido de artefactos y prácticas comportamentales preexistentes y pertinentes.
Avanzando el tiempo, con la adquisición de nuevos conocimientos, munidos de una paciencia admirable, algunos lograron grandes descubrimientos para la humanidad y son recordados siglos después por sus conquistas.
De repente, comienzan a aparecer uniformados, fuertemente armados, munidos de chalecos antibalas, algunos con pasamontañas, sigilosamente, acercándose a una de las casas vecinales.