Las velocidades de obturación lentas, cierto desenfoque añadido, ayudan a dar un atmósfera más ensoñadora, más melancólica a este mundo en que vivimos.
Melancólica, sobre el entarimado, una pareja de mujeres pasea en círculo; alguna que otra rodea a la rubia y se informan acerca de si en verdad le duele la cara.