Al tiempo se fomentó una agricultura especulativa de exportación - azúcar, tabaco, henequén, café etc. - con la consiguiente penetración de capital extrajero.
Tu planteas la resabida cuestión de los costes de producción, reduciéndolos a costes salariales sin incluir los beneficios (consumo de empresario, reinversión, o acumulación-especulativa).