Por las tardes acude al gimnasio (14:30 horas), donde entrena tres horas en promedio, es muy dedicado, siempre está ejercitándose, quiere trascender en el pugilismo.
Nadie podrá decir que el pugilismo es una actividad deshumanizada, cuando ha inspirado a progresistas ha pelear por los derechos humanos y la evolución del espíritu.