Estamos en tiempos de antifeminismo social y hasta teológico, que se traduce en recelo y desprecio hacia las mujeres por parte de los teólogos e inquisidores.
Otra cosa, habemos mujeres (y no sólo yo) aunque te pese que no comulgamos con las ruedas de molino de las posfeministas, que nos parece antifeminismo y conservador.