Las plantas tanto terrestres, palustres y muchas de las acuáticas encuentran su alimento básicamente en los 20-40cm de la primera capa de tierra de la superficie.
En oleadas, invaden y destruyen los glóbulos rojos, lo que provoca los accesos de fiebre característicos de la enfermedad (accesos palustres) y la disminución de los glóbulos rojos (anemia).