Por eso, un estudio interdisciplinar, conducid en común por exegetas y psicólogos o psicoanalistas, presenta ventajas ciertas, fundadas objetivamente y confirmadas en la pastoral.
En particular, el primer teorema demuestra que si sólo admitimos razonamientos cuya validez sea verificable objetivamente entonces siempre habrá verdades matemáticas que no podamos demostrar.