Durante la recanalización se desarrollan los ventrículos laríngeos, bordeados por pliegues de membrana mucosa que se transforman en pliegues vocales (cuerdas vocales) y pliegues vestibulares.
La intervención en voz debe, pues, incorporar programas que ayuden al paciente a identificar y eliminar estas actividades vocales, caracterizadas por la hiperfunción laríngea.