En el 31 por ciento, el motor de la proteína dineína llevó un husillo fuera del centro hacia el centro de la célula durante la anafase, corrigiendo su posición.
Esta tecnología se materializa en una inyectora estándar que incorpora una extrusora de doble husillo corrotante, que separa los procesos de inyección y plastificación.
Se trabajaba directamente con las imágenes fotográficas positivas o negativos y las coordenadas planimétricas y altimétricas se obtenían de escalas y contadores conectados a los husillos.