Puedo juntar mentalmente un gran número de individuos que me son simpáticos, pero formarían un grupo muy disparejo y discorde reunidos en la vida real.
Toda sociedad bien ordenada basa sobre principios profundos y de ellos vive, no de aportaciones adjetivas y extrañas, discordes con el espíritu nacional.
No esperaron mucho, porque unos acordes comenzaron a brotar desde el vientre del instrumento, una armonía extraña, diría se que la suma de sonidos discordes producían un resultado armonioso.