Histológicamente, se compone de fibroblastos estrellados en una matriz moderadamente fibrilar con la presencia ocasional de algunas células epiteliales de origen dentario.
Una vez colocados, durante la consulta odontológica, el dentista puede poner sobre ellos las coronas o puentes fijos que reemplazarán a las piezas dentarias perdidas.
Es más, si una pieza dentaria se daña y el paciente está con bajas defensas puede haber complicaciones graves relacionadas con el tratamiento odontológico.
Inicialmente se practicó una tiroidectomía total por vía cervical, pero la paciente presentó un absceso dentario en el postoperatorio, lo que retrasó la cirugía pulmonar.