Sin embargo, los votos se han volcado por razones que me dan mucho que pensar, más aún si me temo que la mayoría de los que hemos votado somos billaristas.
Finalmente, parece que la medida lo que busca es proteger el espacio público, trasladando la responsabilidad de protegerlo a un grupo selecto de tenderos, billaristas y jugadores de tejo.