Luego del segundo año estaría demostrado el desarrollo de nuevas placas de aterosclerosis, que podrían complicarse con hemorragia, ulceración y trombosis.
Cuando se haya utilizado un tratamiento esteroideo se deberá considerar la posibilidad de una invasión fúngica en ulceraciones persistentes de la córnea.
Es la infección, ulceración y / o destrucción de tejidos profundos asociados con alteraciones neurológicas y diversos grados de enfermedad vascular periférica de las extremidades inferiores.