Todas estas medidas y la nueva situación de mercado que de ellas deriva permitieron que las cadenas de radiodifusión hertziana mantuviesen su hegemonía.
Aunque muchas de estas preguntas seguirán siendo una incógnita, a través de las ondas hertzianas se puede desnudar poco a poco su reservada personalidad.
A parte de las diferencias tecnológicas que la televisión por cable presenta respecto a la hertziana, existen también diferencias en cuanto a programación.