Otra alternativa pueden ser los futones, que constituyen una alternativa más económica a una cama y otros muebles de salón, pero también resultan menos cómodos.
Los futones son uno de los mejores diseños de camas, ya que están hechas de 100 por ciento materiales naturales, pero es una lástima que sean tan bajas.
Dormíamos en el suelo y en la mañana dejaba el futón extendido para colocar ahí a mi bebé, cuando no estaba en brazos (muy raro, hasta como el cuarto mes).