Las razones para las otras veinte revisiones fueron: aflojamiento del cotilo (catorce caderas), luxación (cinco caderas), y lesión del nervio ciático (una cadera).
Los gusanos del tricocéfalo se caracterizan por enterrar sus extremos anteriores o cabezas, en forma de cabello, en la mucosa intestinal provocando una lesión en la misma.
Los perjudiciales son los producidos por procesos crónicos degenerativos, por ejemplo, los derivados de una lesión cancerosa, tuberculosa o una inflamación de las meninges (meningitis).