Los ajolotes son unas sabandijas que nadan en las aguas turbias y verdosas y pasan corriendo a toda velocidad mientras tú te desesperas en la profunda lentitud de la trajinera.
Es importante para mí que tú sepas que no soy una de esas sabandijas tú-puedes-si-crees-que-puedes motivacionales que les venden frijoles a niños incautos.