Supo leer en ellos frustraciones ancestrales, sus miserias y sus debilidades, sus malas mañas y raterías personales, rencores de cien años, traumas no resueltos, necesidades insatisfechas; y ahí se afincó.
Nuevas modalidades de ratería e inserción de actores menores de edad han agravado esta práctica delictiva y, sobre todo, la agresividad hacia las víctimas.
Los del bajo mundo, para buscar impunidad de sus delitos en un régimen de mano dura con la ratería, sobre todo si era producida por los bajos estamentos sociales.