Ocurre cuando, por ejemplo, una empresa es monopolista, cuando existe un oligopolio, un cártel o una mafia o cuando el gobierno reparte prebendas y privilegios.
Plutarquillos bien rentados transforman en miel su acíbar, quintaesenciando en alabanzas sus vinagres más crónicos, como si hipotecaran su ingenio descontando prebendas futuras.