La oftalmoscopia se realiza tras la aplicación de unas gotas para dilatar la pupila, el oculista podrá observar el nervio óptico y sus posibles alteraciones.
El realizar una buena oftalmoscopia depende de una técnica exploratoria adecuada y de práctica constante para poder observar el fondo de ojo, inclusive en condiciones no ideales de exploración.
La oftalmoscopia, o fondo de ojo, es un examen que permite al médico observar mediante unos instrumentos especiales la capa interna del ojo, la retina.
La oftalmoscopia llamada directa se practica con un pequeño aparato denominado oftalmoscopio, una especie de lupa provista de una fuente de luz y una serie de lentes, diafragmas y filtros.