Son parte de un engranaje de intervención más amplio, que, siempre liderado por jóvenes, detecta carencias, imparte formación en oficios y otorga microcréditos.
Instituciones de microcrédito que operaban en pequeñas localidades fueron adquiridas por los bancos y la compra venta de carteras se convirtió en moda.
Dentro de las líneas de microcréditos hay contempladas varias finalidades: acceso a vivienda, iniciativas de autoempleo y creación de microempresas, etc..