Por eso es necesario diferenciarlo, entre otros, entre lipotimia, náuseas, sensación de inseguridad, ataxia, dismetría, desorientación, debilidad de miembros inferiores, síncope y vértigo.
Bastantes consumidores de cánnabis han experimentado en alguna ocasión lipotimias, reacciones paranoides, arritmias o crisis agudas de ansiedad, que pueden durar desde minutos a horas.