A la vuelta, vieron un girasol mal nutrido, con pocas plantas, en el que un tractor tirando un escardillo trataba de sacar infructuosamente unos yuyos que habían crecido demasiado.
Yo traté, infructuosamente, de explicar como armar una palmerita o un volován, la voz seguía imperturbable desde el fondo preguntale a cuanto la docena.....en la panadería.
Empecé, pues, a desandar el camino andando infructuosamente, mirando siempre a derecha e izquierda, ya que rastros no podía seguir en esa tierra cubierta por un coirón duro y raquítico.