El siguiente paso será emplear la espectroscopia óptica como herramienta para visualizar sistemas como la representación química o la tomografía reaccionando con aplicaciones de ingeniería.
Los métodos, bautizados como espectroscopia semi-infrarroja y espectroscopia de correlación difusa, miden la dinámica de concentración de hemoglobina y la dinámica de flujo sanguíneo respectivamente.
Los halogenuros de calcio incluyen el fluoruro fosforescente, que es el compuesto de calcio más abundante y con aplicaciones importantes en espectroscopia.
Pero la espectroscopia es tan precisa que cualquier influencia sobre los electrones se hace visible, incluso cuando sólo se trata de fluctuaciones del vacío.