En la primavera salen fuertes chupones que pueden ser injertados en junio de ese mismo año o del siguiente de yema, bien de escudete, bien con chapa o placa.
Los ejemplares jóvenes mezclan pluma y plumón pardo, ocre y negruzco, más vivamente coloreado en la testa con escudete anaranjado, pico claro con una mancha negra en el extremo.
Caparazón con finas bandas móviles y muy flexibles donde las placas son muy delgadas y uniformes, sin separación nucal entre el caparazón dorsal y el escudete cefálico.