A ese gasto el club añadió el sueldo más cuantioso abonado a un técnico madridista, cerca de 15 millones brutos, más los emolumentos de sus numerosos ayudantes.
Podrá también aumentar la décima de un guardador, deduciendo este aumento de la décima de los otros, cuando hubiere una manifiesta desproporción entre los trabajos y los emolumentos respectivos.
Nando no cobraba ningún emolumento por sus servicios, sin embargo, los pacientes agradecidos le dejaban una ofrenda en metálico de acuerdo a sus posibilidades.
Mientras conversaba, caminaba en círculos; se trataba del ritual del ejecutivo, cual si fuera la danza de la lluvia, pero en este caso, para atraer emolumentos.