En el vestíbulo de la logia se colocaban colgaduras negras con serpientes bordadas; se administraban bebedizos a los novicios que los colocaba en una situación psíquica de máxima receptividad.
En el techo se parecían estalactitas y colgaduras activas que dieron origen acumulos estalagmiticos sobre os bloques deprendidos del techo por efecto de la disolución entre estratos.
Pues bien, me había olvidado de este pedido, cuando de pronto, estando leyendo el diario despreocupadamente, comenzaron a moverse y a tintinear las colgaduras de la araña.
