El desencanto con los partidos y la creciente pauperización posibilitaron que el clientelismo cobrara mayor espacio, especialmente en el conurbano bonaerense.
Su proletarización y pauperización corresponden, en realidad, a procesos históricos más generales que tienen que ver con el conjunto de los campesinos.
La propuesta de una respuesta segregativa nacía a partir de dos claros procesos que se gestaban con el surgimiento del capitalismo: la pauperización y con ello, la cuestión social.
Millones de trabajadores han sufrido la pauperización que es aprovechada por los grandes empresarios para reducir salarios y alargar la jornada de trabajo.