Es evidente la relación entre la temperatura, la presión atmosférica, la humedad con el estado anímico, con la tristeza o depresión, con las patologías mentales...
Lejos de requerir complejas construcciones mentales o de depender de repetición de experiencias y asociación de ideas, los mismos animales cuentan con la eficacia causal y la sustancialidad.
También se manifiesta como dificultades en la comunicación y como una reluctancia a tomar responsabilidad por nuestro propios estados mentales o por los proyectos en los que estas involucrado.