Los movimientos epirogénicos presentan generalmente un carácter nivelador y no suelen producir más que basculamientos, ligeros abombamientos o pequeñas fallas en las rocas.
Si son velos decorativos que ocultan un poco el contenido del cuarto, se usarán materiales muy transparentes y ligeros, bastando en ocasiones los visillos.
Esto obliga habitualmente a utilizar acero, duraluminio o fibra de vidrio o carbono, dado que tienen que ser largos, y a la vez, ligeros y resistentes.
La pieza musical está dividida en cuatro movimientos y se caracteriza por superposiciones entre instrumentos de percusión (pesados) y de cuerda (ligeros).