Entonces es fácil ver en terrenos abiertos a grupos de fringílidos, especialmente pardillos, pinzones, verdecillos, verderones, jilgueros y lúganos, junto con gorriones comunes y molineros y varias especies de escribanos.
Con estos versos pareció que bajaba definitivamente los brazos, derrotado por quienes odian a los gorriones, a los juglares, a los barrios de casitas chatas.