También alivia los males hepáticos, fiebres intestinales, gripe, asma, hidropesía, hipocondría, reumatismo, gota, curación de llagas y abscesos, contusiones, heridas, forúnculos, etc.
Estas transmiten microorganismos causantes de diversas enfermedades (meningoencefalitis, fiebres hemorrágicas, infecciones bacterianas diversas), aumentando este riesgo cuando más tiempo permanezca adherida la garrapata a la piel.
Conocida como quebranta huesos, la picadura del mosquito provoca agudos dolores musculares y articulares y fiebres que los más consumados febrífugos no han podido combatir.