La enterocolitis necrotizante es una enfermedad grave que afecta a recién nacidos, en especial prematuros, con una incidencia y morbimortalidad elevados.
Los esteroides también ayudan a prevenir el sangrado en el cerebro del bebé y una enfermedad grave de los intestinos llamada enterocolitis necrotizante.
Su acción benéfica se prolonga a los casos de enterocolitis, diverticulosis, etc., haciendo desaparecer en muy poco tiempo las fermentaciones con dolores y los gases cólicos que tantas molestias provocan.
Como ampicilina se absorbe menos que amoxicilina por vía digestiva, se la prefiere para tratar enterocolitis bacterianas, ya que el residuo intestinal del antibiótico es mayor.
La leche materna reduce el riesgo de que un bebé nacido a pretérmino tenga enterocolitis necrosante, un problema de vejiga potencialmente mortal, y ayuda a protegerlo de infecciones.
