Para diagnosticar hemicránea continua hay tener un dolor de cabeza que dura tres meses, de un solo lado y que dure todo el día y noche, sin períodos de descanso.
Los antibióticos deben alcanzar unos niveles séricos adecuados, que serán mantenidos mientras dure el tratamiento; es preferiblemente utilizar fármacos bactericidas en lugar de bacteriostáticos.