Alguna vez veremos universidades araucanas, libros impresos en araucano, y nos daremos cuenta de todo lo que hemos perdido en diafanidad, pureza y en energía volcánica.
Hay versos angustiados, a la vez que imbuidos de embrujo y ascetismo, y marcados por la donosura y la diafanidad de la expresión y la profundidad del pensamiento.
Alguna vez veremos universidades araucanas, libros impresos en araucano, y nos daremos cuenta de todo lo que hemos perdido en diafanidad, pureza y energía volcánica.
Y ahora es importante mantener la lámpara encendida, para que guíe nuestros pasos, y nos haga ver con diafanidad los verdaderos valores, la realidad auténtica de las cosas.
Él me hablará con logaritmos enredados entre premisas, con la diafanidad de la palabra y la certeza de la cadencia que se expande desde tu aire hacia mi oído.