De esta manera, aumentarían los radicales libres, responsables de los procesos degenerativos crónicos, como hipertensión, arteriosclerosis, entre otras enfermedades.
Por ejemplo, los conejos sufren arteriosclerosis (endurecimiento de las arterias) y enfermedades como el enfisema, así como defectos congénitos como la espina bífida.
También va a ayudar a la prevención de las enfermedades degenerativas como la arteriosclerosis, estrechamente relacionada con las enfermedades cardiovasculares.