Estos hidrocarburos suelen estar formados por residuos viscosos y alquitranados procedentes de la refinación de crudo y mezclas complejas de compuestos alifáticos y aromáticos pesados, alquitranes y asfaltenos.
La mayoría de los análisis muestran que el petróleo procedente de las arenas alquitranadas es el más contaminante y el que deja la mayor huella de carbono.