Los shamanes emplearon las características narcóticas y anestésicas de la brugmansia al realizar las operaciones rituales o médicas (trepanación de cráneos).
Especialmente, en esta sala, hay que destacar que encontramos un cráneo con una clara deformación y al que también se había practicado una trepanación totalmente curada.
Hoy por la radiación, los defoliantes, la contaminación química de la extracción minera, etc., y antes por el uso de la trepanación craneal, el mercurio o el sangrado terapéutico.