Una confusa profusión de sonidos inarticulados, cortinas musicales, alaridos políticos, voces televisivas, sirenas policiales, anuncios de conciertos internacionales de rock and roll.
Documentar cuántos balazos, acuchillamientos y palizas vemos en las pantallas televisivas, o presenciamos a través de otros medios, puede resultar útil para contrastar esos mensajes con los de otra índole.
En los niños, hay un alto porcentaje que se interesan por las retrasmisiones televisivas de los partidos de fútbol (23,2 %), estando entre sus personajes favoritos los futbolistas.