Esto no demostraba nada científicamente sobre el modelo ptolemaico, que podía modificarse de acuerdo con la observación, pero a muchos ya les produjo un gran desasosiego.
Sin embargo tuvo un éxito importante: fue abrazado por la mayor parte de los astrónomos no copernicanos que se sentían descontentos con el sistema ptolemaico.
En resumen: el sistema heliostático está inserto en la ciencia, mientras que el sistema ptolemaico no era coherente ni siquiera con la física aristotélica.